Lamiendo mis patas, olfateando los arboles, mirando las calles mientras camino sin rumbo fijo, naturaleza que respira, que siente, que vive, aire en mis pulmones, los humanos pasan, de vez en cuando me echan de algún parque, de vez en cuando se asustan un poco, mientras tanto yo sigo con la lengua afuera de tanto andar, juego un poco mas, me pierdo en la contemplación del entorno, los humanos pocas veces notan donde están y es por eso que siguen construyéndose un mundo que cambia cada día solo para sorprenderse a si mismos, pero el mundo esta aquí, en cada rayo de luz que se refleja a mi alrededor. Soy feliz pues no me importa si no me dejan subirme al transporte publico o cosas por el estilo, soy feliz por que puedo sentarme sobre la hierba, jugar con ella, cerrar los ojos y soñar contigo mientras espero a que tus garritas me despierten, soy feliz por que después de eso la vida únicamente se trata de ir tras tus pisadas, conquistar la noche a tu lado y contemplar la inmensidad de Dios. Me enseñaste a ser feliz. Tu eres mi hogar, mi único hogar, mi único amor. Uy...debo dejar de escribir, me dieron ganas de orinar sobre otro auto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario